viernes, 30 de abril de 2010

1er Convenio del Palau de los Hartos

Sorpresa!! A pesar del ambiente de crispación que se vive en el Palau de les Arts, durante este mes se ha firmado el 1er Convenio Colectivo de la fundación, que hace honor a su nombre fundiendo el dinero que le injecta la Generalitat entre otros.

Esto no tiene mucho sentido y sólo tiene dos explicaciones:

1. A nosotros nos han transmitido una sensación de hartazgo, cuando en realidad la vida en el Palau no es tan mala como cuentan los afectados.

2. El comité de empresa está comprado por la empresa y han firmado a pesar de no estar de acuerdo en lo que se ha transformado en el Convenio Colectivo.

Sabiendo los antecedente de la fundación, donde ya han habido despidos de gente que se ha opuesto a ser sobornada para ser un perro fiel de las crueles e irresponsables intenciones de los dirigentes y hacer oídos sordos a las trampas...nos decantamos por la segunda opción.

Siempre se ha dicho que el dinero envilece, pero en el Palau, esta expresión alcanza las cuotas más altas de su significado, premiando a sus perros fieles con aumentos de sueldo, encubiertos con unas supuestas mejoras necesarias, ya que eran gente mal pagada. Así, nos encontramos aumentos de sueldos en gente que según nos cuentan, venía cobrando más de 30.000€, si eso es estar mal pagado...


Es triste ver como hay personas que por cuatro duros, es capaz de venderse al poder y dejar indefensos a sus compañeros, que en el Palau se cuentan por centenares. Son capaces de decir si a algo que en circunstancias normales no aceptarían de ninguna de las maneras.

Porque entre los artículos de este maravillo convenio, encontramos elementos aceptados por la mayoría del comité como es el poder prolongar la jornada semanal hasta las 48 horas o excedencias sin reserva de puesto o...cosas que los trabajadores dábamos por superado en los tiempos que corren. Pues parece ser que en el barco errante, se ha retrocedido un centenar de años, para volver a la época del látigo y el trabajo a destajo. Es el fin de los beneficios sociales que tras años de lucha habían conseguido nuestros padres y abuelos en el estatuto de los trabajadores.

Además, la información que nos llega es que el convenio no está completamente cerrado porque el organigrama, ese que dice donde trabaja y que hace cada uno, aún no está claro. Fácil de entender si dentro del barco "los puestos y responsasbilidades brotan como las setas" y cuando esté el organigrama será bastante más difícil.

Así pues, esperemos que el convenio que se ha firmado, ayude un poquito a controlar a la fiera salvaje que vive sin correa para que al menos, la vileza de los vendidos quede atenuada en parte. Aunque al mismo tiempo, esperamos que los que hayan vendido a sus compañeros en bien propio, no vuelvan a dormir tranquilos hasta que sus compañeros consigan arreglar lo que ellos han estropeado, y lo esperamos con todas las fuerzas, pues el egoísmo es algo que nosotros no aceptamos como medio para llegar a un fin.

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