El Palau hace aguas

Sin dilación en el tiempo y antes de asimilar la bofetada de la denuncia por parte del Comité de empresa de la Fundación por falta de acuerdo con el Convenio Colectivo, a los dirigentes del Palau les ofrecemos el primer capítulo de una largísima saga de "La loca historia del palau", esta vez con una noticia en el Levante por parte de la orquesta como argumento.

En la noticia, la Orquesta se queja de la falta de organización del Palau de les Arts para con ellos. Pero el problema no es sólo con la Orquesta, sino que se extiende a todos los ámbitos y afecta a todos los trabajadores de la fundación, que son más de 300 personas.

La programación, que se prepara de un año para otro desde las entrañas del monstruo de la Avda del Saler, sufre constantes variaciones como la caída del murciélago por falta de presupuesto, cambio de cantantes de última hora, contratación de directores musicales que no ensayan más que dos veces y cobran como si hubieran levantado el Palau ellos sólos...

Esta falta de planificación, que llevan arrajatabla todos los teatros del mundo, provoca, entre otras cosas,  que el Ministerio de Cultura no invierta en esa Fundación al igual que en los demás teatros del País, como los 19 millones del real o los 13 millones del Liceo, los cuales tienen ya planificada la programación de los próximos dos años y que no varían salvo causa de fuerza mayor.

Esta falta de inversión ministerial, responde al miedo que tiene el gobierno central a que el dinero que se ceda sea malgastado en contratos desorbitados y gastos supérfluos e inadmisibles en cualquier caso, máxime si tenemos en cuenta la situación económica del país a día de hoy. No hace falta más que recordar, que el dinero invertido desde el Ministerio de Igualdad para asistencia a las víctimas de violencia de género, lejos de gastarlo en lo que era menester, se ha lapidado por completo en pagar a Ecclestone y su Fórmula 1...una gran inversión ya que en Valencia en Agosto...vamos...no cabía ni un alfiler!!

Esa falta de organización incluye por descontado, un descontrol presupuestario atroz, con un coste para las arcas de la C. Valenciana y por ende para los ciudadanos de esa Comunidad bárbaro. Muchos papeles con cifras escandalosas pueblan los despachos del Palau de les Arts y que trataremos de destripar muy detalladamente.

Todo este desbarajuste, viene propiciado por el desorden total, ejemplarizado en sus dos máximos responsables directos Helga Schmidt y Ernesto Moreno, cuya gestión está llevando al colapso absoluto del coliseo Valenciano.

Seguiremos atentamente estas noticias que están surgiendo "cual fórmula 1 por el puente del circuito" sobre el Palau de los Hartos y que están dejando en entre dicho a aquellos que deciden en ese barco que viaja a la deriva y sin dirección posible que retome el rumbo; mientras tanto, los valencianos seguirán pagando sin derecho a replica 11.000€ diarios que cuesta mantener el "Valenciano Errante".

Agur,